UN HEROE DE MADERA TERCIADA

Pocos artistas se han dado el lujo de llenar la pantalla con un reducido arsenal de recursos dramàticos, pero con una impronta que va màs allà de sus dotes actorales. Y ese gusto se lo pudo dar el recientemente fallecido Charlton Heston.

En Heston el "talento" se presentaba de una forma extraña y difícil de describir , era la mezcla perfecta entre una estampa de madera terciada y una postura melancólica todo terreno, con una facilidad abismante para representar al héroe amargado, deprimido, cuyo destino casi siempre era el de la fatalidad , ya sea succionado por las alcantarillas de una ciudad destruida (Terremoto), llorando frente al último vestigio de una civilización perdida, (Planeta de los Simios), sacrificado por una raza de seres mutantes que sólo aparecen de noche ( El Hombre Omega), o como el cadaver que inspira a sus seguidores mientras se aproxima la batalla final ( El Cid).

El viejo Heston protagonizó durante su carrera una impresionante cantidad de películas, muchas de ellas notables y otras absolutamente olvidables, pero a esta altura a quien le importa.
Charlton Heston ha dejado de existir, el ser humano ha dado paso al mito.